Tuesday, September 5, 2017

Entrevista a la Escritora R.M.  De Loera.  





Hola bonita tarde, primero que nada quiero agradecer por el tiempo que nos brinda para contestar nuestra entrevista y decirle que la novela Chocolate es sin duda un libro que deja huella.



¡Saludos desde la bella isla del encanto! Es un gusto poder platicar contigo y con tu maravilloso grupo, que con sus comentarios han dejado una huella en mi corazón.



1. ¿Cómo supo que quería ser escritora?



Mmm… no lo supe. Jamás pensé que sería escritora. Leí y releí un libro desde marzo de 2015 hasta junio. El mismo una y otra vez, pero fue porqué durante varios años no pude pasar de la primera página de un libro sin que se me olvidara qué decía, es algo que comparto con Amie (El arquitecto). Entonces mi esposo me dijo: «No es un gran libro, tú lo puedes hacer mejor.» (Sí, mi esposo tiene una gran fe en mis habilidades) y fue así casi hasta diciembre de ese mismo año, él con la insistencia y yo ignorándolo… suelo ser terca cuando me dicen qué hacer. Entonces se presentó Edmund y Evelyn en una madrugada y ellos sellaron mi futuro porque amo escribir, amo desaparecer en estas historias y espero las musas me acompañen durante mucho tiempo porque es el trabajo soñado para mí.

Te preguntarás cómo él supo que podía escribir, porque cuando viví en México y asistía a la universidad le escribía cartas donde le describía los árboles de la universidad, los edificios… y eran largas… Pobrecito… jajajajaja.



2. ¿Cómo nace el libro Chocolate?



¿Cómo nació Chocolate? La verdad nadie me pidió que Daniel tuviera un final feliz, pero para mí él era la otra parte de la historia del arquitecto, un hombre que también sufrió y mi corazón es como el de una muñeca de trapo... muy blandito. Entonces una madrugada se presentó su voz, pidiéndome que narrara su historia… Sí, suena a esquizofrenia, pero así son los protagonistas para los que escribimos, nosotros solo transcribimos sus historias, es cuestión de escucharlos y no intentar cambiar sus rumbos porque ellos los tienen definidos, solo necesitan tiempo para darse a conocer.

¿Y cómo se presentó? De la forma más tonta, de un detalle insignificante en El arquitecto y es que al doctor Lorena le gustaba hacer galletas de chocolate… Es una locura lo sé, incluso Gareth (El arquitecto) pone en duda que Daniel hiciera galletas, pero en realidad sí las hace. Con mi grupo bromeo de qué hubiera sucedido si las galletas hubieran sido de almendras o de naranjas, su historia hubiera sido totalmente diferente. Pero no, tenían que ser de chocolate porque su destino estaba ligado desde hace siglos con la diosa del cacao.



3. ¿En quién se inspiró para darle vida al Doctor Daniel Lorena?



En realidad, Daniel nació al querer un hombre totalmente distinto a Gareth. Si él tenía los ojos oscuros, el doctor los tiene claros… son hombres opuestos. Y el nombre… Yo tengo una obsesión con los nombres de mis protagonistas, además de que Daniel es el nombre de mi niño… pero resulta que era el nombre perfecto para él, porque Daniel es un hombre de familia que desea estabilidad y tiene esa necesidad de trabajar con una comunidad y sentirse apreciado… Mmm, ¿delaté algo? Tienen que leer el libro para saber…



4. Siendo usted de Puerto Rico, ¿Cómo se interesó en hacer una novela en la que se habla con tanta pasión de la cultura mexicana?



Amo a México, es el país de mi esposo y viví allá durante ocho años. Su trabajo nos permitió visitar varios estados de la República, doce para ser precisa, así que hablar de México se me hace cercano. México tiene una diversidad cultural y gastronómica que atrapa corazones y también hay que resaltar esas bellezas al mundo.



5. Está de más platicarle que me enamoré de su novela; al hablar del cacao en una forma tan fluida, me hizo vivirla a flor de piel. ¿Cómo se preparó para escribir este libro?



Chocolate nació con esa primera conversación entre Daniel e Ixcacau, pasaron unas semanas y mi lectora cero me dijo la mujer que Daniel ame tiene que ser… deja ver si recuerdo sus palabras exactas… Caripelá (sinvergüenza), con una personalidad arrebatadora, coqueta y pícara… Yo en realidad no sé si Ixcacau se puede describir así, pero cuando hizo acto de presencia, de inmediato supe que era la mujer perfecta para el doctor.

Pero antes de eso quería encontrar el nombre de esa mujer, algo muy cercano al chocolate, alguien que lo conociera a la perfección y ¿quién mejor que la misma diosa del cacao? De ahí investigué todo lo relacionado a ella, aunque solo se menciona una vez en el Popol Vuh.

Me adentré primero en la cultura maya y descubrí a los chontales, descargué un diccionario de español – chontal, encontré uno con anotaciones escritas, lo que se me hizo un poco más fácil.

Luego de eso casi al final estuve un mes buscando cómo era la profesión del doctor Lorena, vi alrededor de diez operaciones en Youtube… sí un poco morboso, pero para poder trasmitirle al lector lo que sucede, tú tienes que tener la experiencia.



6. ¿El proceso con el que se describe para hacer chocolate es real o tiene parte de ficción?



Respecto a la técnica en la elaboración del chocolate vi todos los videos en Youtube de José Ramón Castillo, el mejor chocolatero de México. Su chocolatería es la única de las Américas en pertenecer a las diez mejores en el mundo. Y él compra su chocolate de productores en Tabasco, lo que me llevó a encontrar el lugar idóneo.

En Tabasco hay dos haciendas especializadas en la producción de todo tipo de productos de cacao, la hacienda Jesús María y la hacienda La luz. Ambas ofrecen un tour por sus instalaciones y sus guías son muy precisos y detallistas, esas características fueron las que me permitieron desarrollar la historia. En total estuve dos meses viendo video sobre video para poder construir el mundo de Chocolate.

Intenté ser lo más precisa posible, viendo los movimientos del chef, detenía los videos para poder captar cada instante… no podía ser de otra manera, si ella era una experta en chocolate se tenía que reflejar en la historia. Además, no tuve que fingir nada porque todo el proceso es realmente espectacular.

Quizás lo único que añadí fue el movimiento de su chocolate, pero quien sabe, ella es la diosa del cacao y puede que sus espátulas si invoquen la lluvia.

En realidad, escribir este libro fue interesante y muy divertido… con mucho chocolate a mi lado.



7. ¿Cuál de sus novelas es la que más le gusta?



Es muy difícil porque cada una tiene un lugar especial en mi corazón. Cuando terminé la historia de Edmund y Evelyn no pensé conocer una pareja que cautivara mi corazón y apareció Gareth y Amie. Luego de ellos se me hizo difícil escuchar a Donovan y Liliana, pero una vez que lo hice su historia me enamoró y ¿qué te puedo decir de Daniel e Ixcacau? Una pareja unida por el destino que te hace creer en esa falacia llamada amor. Con Ramón y Maia vives un amor completo… un amor incondicional. Todas las he releído solo por volver a vivir esas historias, volver a sentir lo que me hicieron sentir en el momento que las escribí. Porque si ellos se enojan yo lo hago, si ellos ríen yo lo hago y si lloran… ¿qué les puedo decir? Muchas veces tengo mis ojos hinchados sin motivo.  



8. ¿Cuál sería la crítica más significativa en su vida literaria?



Dentro de todas las críticas que ha recibido la serie: El arquitecto, hay una que sobresale entre todas las demás por la forma en que se dio y que me hizo responder de manera visceral… Una pregunta, ¿se supone que te diga que ha sido un camino de rosas?... Quizás mi respuesta fue excesiva, recuerdo que coloqué una carta extensa en mi muro, pero El arquitecto me acompañó en una etapa muy dura y en aquel momento sentí que la forma de ellas expresarse no fue la adecuada. Pasé coraje, hablé mucho con una compañera escritora, le hice preguntas a lectoras expertas para saber si yo entendía mal la romántica y después con la cabeza fría comencé a investigar los formatos correctos en la lengua española, las divisiones de capítulos y aunque mis obras aún tienen errores, intento mantenerme al tanto de los cambios que se hacen en estilo y gramática a través de cursos, blogs y todo lo que pueda encontrar... no soy experta, tal vez aprendiz entusiasta, que me hace revisar mis obras cada dos meses. Quizás esa experiencia me hace ver como una escritora inasequible, pero en realidad es todo lo contrario y con el paso del tiempo puedo decir que si en algo les fallé pido una disculpa.



9. Si pudiera elegir vivir como uno de sus personajes en cualquiera de tus libros ¿Quién sería y por qué?



He vivido en todos, porque todos presentan algunas vivencias a lo largo de los años. El más cercano, el que te puedo asegurar que lo viví, que sé lo que pasó la protagonista porque yo lo pasé, no en términos del romance o la maternidad subrogada es Ángel.

Y en la fantasía me encantaría vivir en Chocolate para por supuesto ser chocolatera, poder hacer ese ritual sería espectacular.



10. Nos compartiría algo que nadie sabe de R.M. De Loera.



No sé qué contestar… Soy muy callada, soy de las personas que observan, quizás por eso estudié psicología… Me encanta la cocina, pero eso lo saben por mis libros, tengo una certificación en gastronomía… Una manía… el ruido me enloquece, una gota de agua, el televisor encendido, aunque sea en murmullo… ¡Oh! Me pongo histérica si te pegas a mí y no me conoces. En el supermercado lo hacen mucho, al parecer a las personas se les olvido el espacio personal, mi esposo es como escudo porque sabe que es algo con lo que no puedo lidiar y no es que tenga miedo de que me hagan algo, es que no puedo… no puedo, me hace sentir acorralada… soy irracional lo sé.

Y algo bueno porque quizás dije puras cosas malas es que soy leal con las personas, una vez me dan esa oportunidad de soltar la timidez, la amistad será para siempre, aunque no nos hablemos en meses, me gusta estar para las personas, dar apoyo si lo necesitan y hacer reír…

Una manía literaria es que para poder arrancar una historia tengo que empezar con una libreta (cuaderno) y bolígrafo, sino por más que tenga la historia y los protagonistas rondándome no puedo escribir… es algo raro.



¡Wao! Muchísimas gracias por la oportunidad que me has dado para platicar contigo, espero no haberme extendido demasiado. Muchisísimas gracias por leer mi historia, está escrita con mucho cariño, con deseos de ofrecerles algo más. Te deseo toda la buena vibra para tu próximo lanzamiento, estoy segura que será un éxito.

Un abrazo enorme,


R.M.  De Loera.  

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